En Kindling llevamos más de 40 años dedicándonos al control y gestión de plagas, nuestros clientes pertenecen a diversos sectores pero somos especialistas en el sector de la alimentación.
Llevamos a cabo nuestros tratamientos de sanidad ambiental en empresas y establecimientos. Nuestros servicios siempre se basan en la importancia de la prevención, la inspección y el control. En este caso nos centraremos en el primero de ellos, la prevención.
La principal defensa contra las plagas es evitar que estas accedan a los productos almacenados. Por tanto uno de los aspectos que más hay que tener en cuenta es la higiene y el saneamiento, que se deben mantener siempre al más alto nivel, especialmente en los meses de más calor, debido a que el calor acelera el desarrollo de las plagas. Además de esto, estas son algunas de las recomendaciones que pueden serte de gran ayuda:
1. El almacenamiento de los productos debe realizarse el lugares elevados del suelo y retirados de las paredes para facilitar la limpieza y la inspección.
2. Intentar mantener las materias primas en cuarentena antes de introducirla en la fase de producción, para evitar así que si alguna está contaminada no perjudique a toda la fábrica.
3. Asegurar el mayor nivel de higiene y saneamiento posible, poniendo en práctica medidas rutinarias de orden y limpieza.
4. Controlar la temperatura: intentando mantener las instalaciones de almacenamiento a menos de 16 grados, y con una humedad por debajo del 30%.
5. Llevar a cabo una auditoría y control de las materias primas, los envases y de los procedimientos de producción.
6. Contactar con una empresa de desinfección ante cualquier problema. Puedes contar con nuestros servicios tanto para la prevención como para el control. De esta manera sabrás que todo lo relacionado con la seguridad de tu empresa en materia de plagas estará subsanada por Kindling.
